Las recientes críticas del Colegio Médico de Chile (Colmed) hacia la fiscalización de la emisión de licencias médicas resultan preocupantes y desatinadas. En un contexto donde más del 50% de la cotización obligatoria del 7% destinada a salud se utiliza para pagar licencias médicas, es imperativo fortalecer los mecanismos de control para garantizar la sostenibilidad del sistema de salud .
El Colmed ha manifestado su “total rechazo” a la forma en que se está llevando a cabo la fiscalización, alegando falta de garantías mínimas de debido proceso y sanciones injustas a médicos que han actuado correctamente . Sin embargo, esta postura ignora la magnitud del problema: en 2022, el gasto en subsidios por incapacidad laboral alcanzó los US$3.600 millones, representando el 1,2% del PIB, con un 66% de ese total pagado por Fonasa .
La fiscalización no es una persecución, sino una herramienta esencial para detectar y sancionar prácticas fraudulentas que afectan a todo el sistema. El Ministerio de Salud ha señalado que la fiscalización se realiza identificando patrones atípicos de emisión, enfocándose en grandes emisores de licencias . Además, la Superintendencia de Seguridad Social ha estimado que existen cerca de 450 médicos grandes emisores de licencias médicas, iniciando programas de fiscalización por posibles fraudes .
Es fundamental que el Colmed colabore con las autoridades para mejorar los procesos de fiscalización, en lugar de obstaculizarlos. La defensa corporativa a ultranza no solo es injustificable, sino que también pone en riesgo la sostenibilidad financiera del sistema de salud y la confianza de la ciudadanía en las instituciones.
La salud pública requiere de responsabilidad y compromiso de todos los actores involucrados. Es momento de que el Colegio Médico asuma un rol constructivo, contribuyendo a fortalecer los mecanismos de control y asegurando que los recursos destinados a salud se utilicen de manera eficiente y transparente.
Solo así podremos garantizar un sistema de salud sostenible y equitativo para todos los chilenos.