El corte de energía afectó servicios esenciales como el transporte público y paralizó actividades en amplias zonas de la península ibérica. Autoridades descartan, por ahora, un ciberataque como causa del incidente.
Un corte masivo de electricidad ocurrido la mañana de este lunes, alrededor de las 6:30 (hora local), dejó sin suministro eléctrico a gran parte de la España peninsular, Portugal y sectores del sur de Francia, generando serias complicaciones en los servicios básicos y en la vida cotidiana de millones de personas.
En España, el apagón afectó de forma directa al transporte público, incluyendo la suspensión de todos los trenes de Adif, aunque se habilitaron trenes de evacuación hacia ciudades como Sevilla y Barcelona. La mayoría de las líneas de Metro también permanecen fuera de servicio, mientras que los aeropuertos continúan operando con demoras. El Gobierno asumió el control de la emergencia en varias comunidades autónomas, como Madrid, Andalucía, Murcia y Extremadura.
Desde Red Eléctrica informaron que cerca del 35% de la demanda eléctrica ya ha sido restablecida, y que la normalización del servicio podría extenderse hasta la noche, entre las 21:00 y 23:00 horas, según declaró el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez. También hizo un llamado a no especular sobre las causas del apagón y a no saturar los servicios de emergencia.
En Portugal, donde el sistema eléctrico depende en parte de España, el restablecimiento ha sido más lento. Lisboa es una de las zonas más afectadas y, según su alcalde, Carlos Moedas, podría permanecer sin luz hasta la madrugada del martes. A pesar del corte, los servicios críticos como hospitales, transporte y seguridad se mantienen operativos.
La compañía eléctrica portuguesa REN informó que unas 300.000 personas ya han recuperado el servicio, lo que representa apenas un 3% de la población. Se espera que ciudades como Oporto restablezcan su suministro antes que la capital.
Por ahora, las autoridades han descartado indicios de un ciberataque, pese a los rumores que circularon en redes sociales. El presidente del Consejo Europeo, António Costa, enfatizó que no existe evidencia técnica que apunte a una intervención externa.