Autoridades han desarrollado un plan de emergencia en la zona donde también se han registrado cortes de luz, intensas lluvias y vientos de hasta 220 kilómetros por hora.
“Lo peor está por venir” advertía Jane Castor, la alcaldesa de Tampa, uno de los sectores de Florida en Estados Unidos por donde aterrizó el huracán Ian, uno de los más peligrosos de los últimos años que tocó tierra en ese estado en categoría 4, con vientos de hasta 220 kilómetros por hora.
El huracán llegó a Florida también con lluvias torrenciales, provocando inundaciones en calles y viviendas, además de cortes de electricidad y destrozos que aún son difíciles de calcular.
Las autoridades han informado de personas atrapadas y viviendas totalmente anegadas.
Al sur de la ruta del huracán, cerca de los Cayos de Florida, las malas condiciones hicieron naufragar una embarcación que transportaba migrantes, mientras los guardacostas buscaban todavía a 20 personas.
Tres de los náufragos fueron rescatados del agua, mientras que otros cuatro lograron llegar a nado hasta la costa.
“Es uno de los cinco peores huracanes que han azotado la península de Florida”, dijo el gobernador de Florida, Ron DeSantis.