El alcalde de Santiago critica las ocupaciones estudiantiles que afectan establecimientos como el Instituto Nacional y acusa amenazas de muerte para justificar medidas más duras.
El alcalde, Mario Desbordes use firmemente contra las recientes tomas en liceos emblemáticos de Santiago, criticando que las movilizaciones recientes han “destruido la educación pública” y señalando la influencia de adultos “que financian y justifican a minorías que capturan a una mayoría que quiere estudiar”.
Este viernes, estudiantes del Instituto Nacional y los liceos N°1, N°4, de Aplicación y Barros Borgoño iniciaron tomas en protesta por la falta de respuesta a reiteradas solicitudes de reunión con el municipio. En el comunicado del Centro de Estudiantes del Instituto Nacional se acusó al alcalde de negarse a escuchar las demandas educativas, por lo que decidieron suspender las actividades académicas desde las 09:15 horas para forzar una respuesta.
Desbordes también informó sobre disturbios, como panfleteos con su rostro representado con armas, y confirmó haber recibido amenazas de muerte. Calificó algunos de los hechos como actos de “violencia anarquista”, respaldando su descripción con datos: casi 600 molotov lanzadas en el Instituto Nacional y 180 en el Internado Barros Arana el año anterior. Afirmó que la situación requiere intervención legal y citó el uso de medidas como la Ley Aula Segura y querellas criminales en curso.
Esta situación reaviva el debate sobre educación pública en la ciudad, donde algunos actores sociales llaman a privilegiar el diálogo y evitar un enfoque exclusivamente represivo. Sin embargo, Desbordes insiste en que se exige un equilibrio entre orden, justicia y apertura al diálogo.