El mandatario estadounidense responsabilizó a Israel por el bombardeo en la iglesia de Gaza, generando tensión diplomática en el contexto de la crisis humanitaria.
Donald Trump censuró duramente al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, tras el ataque que provocó la muerte de tres personas en una iglesia cristiana de Gaza. El presidente sostuvo que el incidente es una señal de falta de control en la campaña militar israelí y lo utilizó para cuestionar la estrategia operativa de su aliado en Oriente Medio.
Trump advirtió que este tipo de acciones “no ayudan a ganar guerras, pero sí a perder el apoyo internacional” y afirmó que Israel debe revisar sus procedimientos para evitar que sitios religiosos y civiles continúen siendo objetivos. Sus declaraciones prolongan el debate global sobre el balance entre seguridad y respeto a estructuras sagradas en medio del conflicto.

